El Salto de Vivir - historia basado en hechos reales -


Lima, 1974. Perú.
Daniela regresaba, como siempre del colegio de monjas, bien ordenada y seria. No le daba confianza ni mirada a nadie en el camino. Vive en en una casa enorme junto a sus 5 hermanos: Héctor, Jaime, Hualo, Chana, la bebé menor,  y Jorge. Ella está en la etapa más bella de su adolescencia, 16 años, y va floreciendo nuevas motivaciones en su vida. Este día Annie, su amiga de carpeta, le ha invitado a saltar en paracaídas en un curso que quiere inscribirse y que tan sólo lo dan en la escuela militar. Annie es tan delgada como Daniela, pero más coqueta y atrevida que no soporta el largo del uniforme que las monjas exigen. Se lo sube.

Sentados en la mesa están los 4 hermanos. La señora María, muy recta y dura con sus hijos siempre, observa cada movimiento o gesto de sus 6 hijos mientras está terminando de dar de comer a su pequeña de 8 meses en su silla. Si no se terminaran todo el plato o todos los platos, es capaz de darle tantos golpes que dejen marcas que hagan recordar obediencia y nada de bromas hacia ella.

Daniela se apresura por ello en llegar a tiempo del almuerzo y no hacer esperar a nadie su llegada para no ser castigada. Se encarga de acompañar a la criada de la casa a llevar los platos a la cocina para que sean lavados. Su moño se suelta, lo que hace caer su cabello largo y castaño en sus hombros, mientras ensaya cómo pedir permiso a sus padres para saltar en paracaídas junto a su amiga. Se apresura a cambiarse. 

continuará

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